ESCORIAS EN EL CASTILLO

Iglesia de Vadocondes. Ventana y escorias.
Vadocondes. Iglesia y rollo. 
FOTOGRAFÍAS: Iglesia parroquial de Vadocondes. Castillo de Huérmeces (Tomadas en 2007 y 2010) 

Esta ventana que aquí vemos pertenece a las iglesia de Vadocondes, esa hermosa localidad burgalesa que duerme a orillas de un Duero remansado. Pero no es la ventana barroca lo que hoy me trae aquí, que por su originalidad y elegancia merecería figurar en la galería de ventanas ilustres que aquí seguimos, sino las escorias incrustadas en los muros de dicho templo. Confieso mi ignorancia, confieso que esas escorias salpicando las junturas del mampuesto me sorprendieron, pues nunca antes las había observado en otros monumentos. Picaron mi curiosidad en 2007, en una visita que hice a Vadocondes siguiendo a un zapatero ambulante, y comencé a hacer cábalas sobre su significado. Adornos no parecían, pero tan poco versado como soy en técnicas de construcción, no encontré una explicación que me dejara satisfecho. Y el tema fue quedando en el olvido. Hoy tengo que reconocer que tampoco lo tengo muy claro, aunque hurgando en mis archivos he encontrado una fotografía del castillo de Huérmeces en uno de cuyos muros pueden verse, incrustadas también y de la misma manera, parecidas escorias en el mortero de uno de los muros, en el que mira al oriente. Ya no era, pues, un caso aislado el de Vadocondes, y la coincidencia me llevó a pensar que la práctica de incrustar escorias en la masa de las junturas debió ser en alguna época algo hasta cierto punto común, quizá utilizadas para dar consistencia y resistencia a revocos y otros añadidos, o tal vez para un mejor fraguado del mortero. Las escorias de Vadocondes deben ser de hierro, al igual que las de Huérmeces, pero las épocas en que se hicieron dichos revocos parecen distintas, mientras que en el pueblo ribereño se corresponden con tiempos del barroco, en el castillo de Huérmeces podría ser más antiguas, a no ser que esta fortaleza fuera objeto de reparos en un tiempo coincidente. Para un mejor conocimientos de la cuestión, prometo desde ahora estar vigilante ante la posibilidad de hallazgos semejantes en los monumentos burgaleses. De todos modos, seguro que entre vosotros, queridos amigos y seguidores de este Cajón de Sastre, hay alguien que puede iluminarnos a todos sobre el tema.

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